Impactar al público objetivo es, sin lugar a dudas, la meta de cualquier campaña de marketing. Que un potencial consumidor recuerde una acción publicitaria es la mayor garantía de éxito que puede obtener una marca. El problema viene cuando analizamos un mundo lleno de posibilidades donde ser el más original e impactante se vuelve un trabajo duro y nada sencillo.
Pero lo cierto es que captar la atención es solo la mitad de la batalla; la otra mitad es retenerla. Conseguir una estrategia de marketing innovadora no solo es cuestión de crear sorpresa, sino de mantener esa emoción y mantener a la audiencia comprometida a largo plazo. Al sorprender a los consumidores, se crea un lazo emocional que puede traducirse en lealtad a la marca y en una relación más sólida y duradera.
Quizás sea esta la premisa de muchos marketinianos a la hora de hacer campañas excéntricas y que superan la ficción. Aún sin tener certezas de ello, puede que esto sea lo que está ocurriendo ahora mismo en Madrid. La capital se levantó el pasado 11 de octubre con la noticia de que un coche había sido aplastado en pleno centro de la ciudad y, alrededor, lo que parecían ser excrementos de un desconocido animal. La noticia saltó gracias a un vídeo de Tik Tok (primer indicio de que esto puede tener algo que ver con el influencer marketing) y las teorías no dejaron de sucederse. La primera de ellas acusaba los destrozos a que un animal- posiblemente un elefante- se había escapado del zoológico madrileño y campaña a sus anchas por la zona norte de la ciudad. La segunda decía que podría tratarse del rodaje de alguna película y, aunque podría ser, suena un poco sospechoso que la propia organización del rodaje dejara Madrid en esas condiciones. La tercera de las teorías es la que más fuerza cobra, al menos en el mundo de la publicidad. Puede que se trate de una promoción a gran escala de algún estreno o simplemente una campaña publicitaria de alguna marca. Es un claro ejemplo de cómo la intriga y lo inesperado pueden captar la atención y mantenerla, provocando conversaciones y generando un impacto duradero.
Pero esta no ha sido el único suceso que ha dejado en vilo a la ciudad y que lleva la palabra marketing como apellido. Hace unos meses Young Beef, una sensación en el mundo del trap, decidió llevar su publicidad a un nivel completamente nuevo al lanzar una cantidad considerable de dinero en una de las plazas más concurridas de Madrid, Callao. Este acto no solo generó un gran revuelo y curiosidad entre los transeúntes, sino que también se convirtió en un tema de conversación en redes sociales y medios de comunicación. ¿Por qué? Porque desafió la norma, rompió barreras y dejó a todos preguntándose sobre la estrategia detrás de esta inusual campaña.
La diruptividad en el marketing
Estos ejemplos destacan la importancia de la creatividad y la originalidad en el marketing. Para destacar en un mundo saturado de información y estímulos visuales, es fundamental romper con las convenciones y desafiar las expectativas. Estas campañas audaces no solo atraen la atención inicial, sino que generan un zumbido constante y duradero, manteniendo a los consumidores interesados y comprometidos.
El marketing audaz y creativo tiene el poder de traspasar fronteras, desafiar lo establecido y captar la atención de manera única. Romper la monotonía y sorprender a la audiencia es crucial para mantener la relevancia en un mundo saturado de información. La innovación y la originalidad son las llaves para conquistar a los consumidores y asegurar un lugar destacado en su mente y sus corazones.